FRACTURA

Es la pérdida de la continuidad ósea, y se distinguen dos tipos principales de fracturas: 1) Fractura cerrada, es aquella en la cual la piel permanece intacta y si este tipo de fractura se maneja de forma inadecuada, puede agravarse peligrosamente transformándose en abierta o complicada. 2) Fractura abierta, en esta lesión una herida en la piel pone en comunicación el foco de la fractura con el exterior. Este tipo de fractura es grave por el riesgo de infección, exigiendo cuidados especiales. Se habla de una fractura complicada cuando los fragmentos cortantes del hueso roto han dañado algún órgano (vasos sanguíneos, nervios, pulmones, médula espinal); esta clase de fractura puede darse tanto en uno como en otro de los dos casos citados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario